Ayer me preguntaron cuál creía que era el arma secreta para el éxito, hoy analizando la pregunta, me atrevo a decir que todo depende de a qué le llames éxito,
Yo, le llamo éxito a tener a mi lado a la gente que me aprecia y me respeta, a los mensajitos en mi buzón de los amigos que me extrañan, a poder verme en los ojos de un alguien especial que en lugar de exigirme lavarle la ropa se ofrece a ayudarme, le llamo éxito a sentirme plena en mi trabajo, sentir que la vida es perfecta, a respirar cada mañana e imaginar que estoy en un sueño, pero lo más hermoso y a lo que también llamo éxito, es a escuchar esas hermosas risitas por la tarde y a ver que la alfombra se ha teñido del verde del pasto, formando perfectas huellitas.
Una vez aclarado qué es el éxito para mí, me corresponde contestar a la pregunta, mi arma secreta ha sido el reconocimiento de mi yo interior y la confianza que antes no tenía en mí misma, no fui una adolescente promedio, mi vida fue casi una telenovela, llena de miedos, de dolor, de angustia y a veces hasta de sangre. Pero ahora lo que interesa es mi arma secreta.
Encontré mi arma secreta escondida en lo más recondito de mi alma, dónde creía que no podía haber más que oscuridad, ahí entre tinieblas y humedad estaba escondidita como si se tratase de un tesoro, justo dentro de un cofre de madera que brillaba como si tuviera oro (no era oro, pero como si lo fuera) y cuando la encontré me juré jamás volver a dejarla ir, ese día me reconocí, me exploré de pies a cabeza y me desnudé el alma, ya con el alma desnuda me vi al espejo y me prometí disfrutar de cada cosa no material que sucediera en mi vida, de ese modo lo entendí todo y encontré el éxito.
Y justo cuando empecé a amarme y a respetarme, fue que todo surgió como inesperado y empezó a llegar gente maravillosa a mi vida, y con el paso de los años encontré la alegría en esos piecitos maravillosos que decoran mi alfombra de verde pasto.
Finalmente y respondiendo a la pregunta, puedo dar el arma secreta de Mí éxito, pero no podría hablar del éxito en general, porque las concepciones del éxito son como los medicamentos, pueden variar de persona a persona.
=)