Una historia de paletas

En una heladería una paleta de coco con naranja recien llegada conocía a sus nuevas compañeras de refrigerador, llegó la paleta de naranja y la insultó al no entender que ella era de leche y naranja a la vez.
Segundos después llegó la paleta de coco y quizo sacarla del refri para que se derritiera, la paleta de coco y naranja no entendía lo que pasaba...

Del lugar del que ella venía todos podían tener ambos sabores, pero al lugar al que había llegado era necesario ser de un sólo sabor para ser aceptada... al día de hoy la paleta de coco y naranja no puede dejar de llorar y se esconde en el refrigerador hasta la llegada de una paleta = a ella, con la esperanza de que en algún momento las demás paletas entiendan que se puede ser lo que se quiera en cualquier refrigerador...